En Madrid, España fue detenido un marroquí de nombra Said líder del cártel de los Zetas en Europa, que dirigía las operaciones del grupo criminal mexicano desde hace unos años. La autoridad española comentó que en el operativo también se incautaron 400 kilos de cocaína, procedente de México, 220 mil euros, teléfonos y material informática.
Junto con el líder de los Zetas en Europa se detuvieron a cuatro personas más, tres colombianos y un dominicano. Fue una operación de forma conjunta entre los agentes españoles, la Policía Nacional de Colombia y la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional de Estados Unidos (EU), y se trata de la segundo mayor operación contra los clanes del narcotráfico mexicano en España y con la que además se da por desarticulada la ramificación de los Zetas en Europa.
Las detenciones se dieron al momento de una transacción de droga y dinero entre el líder de los Zetas y un conocido narcotraficante colombiano conocido como El Repetido, porque es uno de los hermanos trillizos que son bien conocidos en Colombia por sus actividades ilegales.
El jefe de la organización mantenía un elevado número de reuniones de manera constante y con diferentes personas, dificultando la labor policial para poder precisar cuáles eran de relevancia para la investigación. Sin embargo, en los últimos meses no solo aumentó las medidas de autoprotección, sino que llegó a incrementar el número de estas reuniones, lo que alertó a los agentes que podía encontrarse en la fase final de una importación de cocaína. Como así fue.
«Agentes de la Policía Nacional, en una operación conjunta con la Policía Nacional de Colombia y la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional de Estados Unidos (HSI), han detenido en Madrid al representante en Europa de la organización mexicana de los ‘ZETAS'», informó la Policía Nacional en un comunicado.
El detenido es un ciudadano marroquí nacido en 1969, precisó a la AFP un portavoz de la Policía Nacional, «distribuía» a «personas de su confianza a lo largo del territorio nacional y en Europa, en concreto en Países Bajos», cuyo puerto de Róterdam es una de las grandes puertas de entrada de droga a Europa.
