Faltan mes y medio para que la actual temporada de actividad ciclónica concluya en nuestro país, y la temporada de huracanes, aunque no ha sido tan activa como lo pronosticado por la Comisión Nacional del Agua y el Servicio Meteorológico Nacional el pasado 6 de mayo, se ha mantenido cerca de los promedios esperados.
Hasta el momento, en la cuenca del Pacífico se han formado 11 sistemas tropicales de los 15 a 18 que se pronosticaban. En cuanto al Atlántico, de los 20 a 23 sistemas tropicales previstos, se han presentado 13.
“Respecto a los pronósticos, aún es temprano para hacer una evaluación de qué tan acertados fueron. Todavía falta para que finalice la temporada de huracanes y quizá lo más significativo sea que en el Atlántico aún hay un margen para alcanzar una temporada promedio o ligeramente por encima de este, dado que el promedio de sistemas tropicales en esta cuenca es de 14 y, hasta el momento, van 13. El pronóstico indicaba que quizá alcanzaríamos una temporada hiperactiva, es decir, con una actividad mayor de la esperada, pero ahora parece difícil que eso ocurra”, explicaron especialistas de la UNAM.
Actualmente hay probabilidades de que en los próximos días se formen dos nuevos sistemas tropicales: uno de ellos ubicado en el Caribe y otro con su origen en una onda tropical formada en la costa de África. Los pronosticadores han expresado preocupación, ya que ambos tienen potencial para volverse sistemas tropicales, debido a que “tanto el océano como la atmósfera están activos y favorecen el desarrollo de estos eventos”. A pesar de ello, en las próximas dos semanas se sabrá si los sistemas lograron formarse, disiparse o fortalecerse.
Al igual que en los sismos, tener una maleta o bolsa con los documentos importantes a la mano.
Tener un suministro de emergencia (botiquín, radio de pilas, linterna, agua embotellada, alimentos enlatados).
En cuestión de un día, Milton pasó de ser un huracán categoría uno a categoría 5. De acuerdo con los expertos en el tema, este evento se vio favorecido por los vientos del oeste, pero también por otro factor: la temperatura de la superficie del mar. Cuando Milton se formó, la temperatura de esta era de 30°C, ligeramente superior al promedio en el Golfo de México (27°C), pero lo suficiente para favorecer la intensificación de un huracán destructivo.
Debido a que en la última década han ocurrido huracanes con vientos más fuertes que los establecidos para la categoría 5 por la escala Saffir-Simpson, se ha propuesto agregar la categoría 6. Este planteamiento surge de los científicos estadounidenses Michael F. Wehner y James P. Kossin, quienes explican los motivos para esta sugerencia.
A pesar de que su trabajo tiene buenos fundamentos, la comunidad científica no está totalmente convencida, y en esa misma línea se mantiene el Dr. Jaramillo Moreno al manifestar que “si bien habrá huracanes más intensos alimentados por el calentamiento global, no es necesario agregar una nueva categoría, sino revisar la ya existente”.
“La escala Saffir-Simpson se basa únicamente en la intensidad de los vientos de un huracán, pero existen otros factores asociados a estos sistemas que aumentan su peligrosidad, como la marea de tormenta y la precipitación. Sin embargo, la escala Saffir-Simpson mide el peligro únicamente a través de los vientos. Es fundamental realizar una evaluación más integral del riesgo que representan estos sistemas, y esta discusión debería ser prioritaria antes de considerar la adición de una nueva categoría”, dijo.