LAS COMUNIDADES GAY DURANTE EL HOLOCAUSTO EN ALEMANIA
El régimen nazi llevó a cabo una campaña contra la homosexualidad masculina de 1933 a 1945. En esta campaña se persiguió a los hombres que tenían relaciones sexuales con otros hombres. No está claro cuántos de esos hombres se identificaban como gays en privado o en público, ni si formaban parte de las comunidades y redes de gays que se establecieron en Alemania antes de que los nazis subieran al poder.
Un artículo denominado Enciclopedia del Holocausto señala que a partir de 1933, el régimen nazi acosó a esas comunidades y las desmanteló. También arrestaron a gran cantidad de hombres gays de conformidad con el párrafo 175, el estatuto del código penal alemán que prohibía las relaciones sexuales entre hombres.
Durante el período nazi, la policía arrestó a unos 100 mil hombres porque supuestamente violaron este estatuto. Aproximadamente cincuenta por ciento de estos hombres fueron declarados culpables. En algunos casos, esto llevó a su encarcelamiento en campos de concentración.
Es importante señalar que no todos los hombres arrestados y condenados de conformidad con el párrafo 175 se identificaban como gays. Sin embargo, cualquier hombre que tuviera relaciones sexuales con otro corría el riesgo de ser arrestado en la Alemania nazi, sin importar la forma en que él mismo entendía su sexualidad.
HOMOSEXUALIDAD EN RIESGO
Identificarse como gay nunca estuvo penalizado explícitamente en Alemania. Sin embargo, la campaña nazi contra la homosexualidad y la estricta aplicación del párrafo 175 por parte de los nazis hizo que la vida en la Alemania nazi fuera peligrosa para los gays.
Los hombres gays en Alemania no eran un grupo monolítico, y el régimen nazi no los veía de esa forma. Ser gay podía ser causa de persecución, y con frecuencia resultaba en eso. Sin embargo, hubo otros factores que moldearon la vida de los gays durante la era nazi. Entre ellos estaban la supuesta identidad racial, las actitudes políticas, la clase social y las expectativas culturales sobre la forma en que debían comportarse los hombres y las mujeres (es decir, las normas de género).
Esta diversidad significó que los hombres gays tuvieron una gran variedad de experiencias en la Alemania nazi. Por ejemplo, los hombres gays que participaban en movimientos políticos antinazis corrían el riesgo de ser arrestados como opositores políticos. Los judíos gays se enfrentaron a la persecución nazi y al asesinato masivo por ser judíos.
CRECIMIENTO DE COMUNIDADES GAYS
Ya desde la segunda mitad del siglo XIX había en Alemania indicios de comunidades gays incipientes y en crecimiento. En esta época, la naturaleza de la sexualidad humana se convirtió en un área de investigación científica, así como de debate en Europa y Estados Unidos. Alemania estaba a la vanguardia de este acontecimiento, sobre todo por los debates respecto al párrafo 175, el estatuto del código penal alemán que prohibía las relaciones sexuales entre hombres. Fue promulgado en 1871, después de la unificación del Imperio Alemán y la codificación del derecho alemán.
Pero algunos líderes, así como miembros comunes del Partido Nazi, tenían actitudes más variadas y ambivalentes. En el movimiento nazi había hombres gays conocidos, el más notable de los cuales era Ernst Röhm, quien se describía a sí mismo como “gleichgeschlechtlich”, orientado al mismo sexo. Röhm era el jefe de las SA (Sturmabteilung, conocida comúnmente como las tropas de asalto), las violentas y radicales tropas paralimilitares nazis.
MOJIGATERIA NAZI
Para Röhm, su sexualidad no entraba en conflicto con la ideología ni comprometía su papel como jefe de las SA. Röhm creía que legalizar las relaciones sexuales entre hombres no era cuestión de fomentar los derechos democráticos ni la tolerancia. Más bien, pensaba que se trataba de demoler la moralidad convencional. Röhm escribió que la “mojigatería” de algunos de sus compañeros nazis “no me parece muy revolucionaria”.
La sexualidad de Röhm era un secreto a voces en el Partido Nazi, y se volvió un escándalo público en 1931. Un periódico izquierdista publicó que Röhm era gay. Entonces, el Partido Socialdemócrata de Alemania (Sozialdemokratische Partei Deutschlands), de izquierda moderada, aprovechó su sexualidad para su propaganda electoral.
A pesar de la controversia, Hitler defendió a Röhm, y así se mantuvo al mando de las SA hasta que Hitler lo mandó asesinar en 1934. Sin embargo, la posición de Röhm en el liderazgo nazi no atenuó la condena del movimiento hacia la homosexualidad y las comunidades gays.
CIERRE DE BARES GAY
Harry Pauly
De niño creciendo en Berlín, Harry desarrolló su amor por el teatro. A los 15 años, empezó a actuar en papeles menores en un teatro en la Nollendorfplatz. También hizo de aprendiz en una peluquería pero no le gustó el trabajo. Pasaba la mayoría de su tiempo con otros actores, en el teatro y el las discotecas donde se reunían los homosexuales.
1933-39: Cuando los nazis subieron al poder, cerraron los bares gay. Algunos homosexuales, especialmente los que eran judíos, fueron asesinados por matones nazis; mi amigo “Susi”, una gran reina, fué matada a puñaladas. En 1936 fuí arrestado bajo el párrafo 175 del código criminal modificado por los nazis que prohibía la homosexualidad. Fuí encarcelado en un campo en Neusustrum donde trabajaba en los pantanos doce horas por día. Después de 15 meses me soltaron.
SUCIO MARICA
1940-44: En 1943, fuí entregado a la Gestapo por dos chicos presionados para que denunciaran homosexuales. De nuevo, fuí condenado bajo el párrafo 175. De nuevo fuí soltado, esta vez después de solamente ocho meses porque amigos del teatro intervinieron en mi nombre. Después fuí reclutado al ejército pero a donde iba, la gente sabía de mi condenación de 175 y me llamaban «sucio marica». No lo podía soportar y deserté dos veces. Finalmente, como castigo, fuí mandado a una unidad especial de combate en la cual casi todos morían. De alguna manera pude sobrevivir.
Después de la guerra, Harry empezó su propio teatro pequeño.
Texto tomado de la Enciclopedia del Holocausto