Hay un sin fin de razones que nos provocan dormir mal, algunas de las cuales están bajo tu control como, por ejemplo, el exceso de compromisos y fiestas que conllevan las celebridades navideñas. Pero también existen otros factores que influyen en el sueño además de la ingesta excesiva de alcohol y las trasnochadas, por ejemplo, desde los acontecimientos estresantes de nuestra vida cotidiana, hasta los problemas relacionados con la salud que dificultan conciliar el sueño o bien, permanecer dormidos.
Independientemente de la razón, recuperar el sueño es crucial para el bienestar mental, para la productividad diurna, la calidad de vida y la salud en general.
«Me gusta dividir la salud en cuatro categorías principales: cómo comemos, cómo nos movemos, cómo interactuamos socialmente y cómo dormimos», explica el Dr. Randall Wright, neurólogo que se especializa en medicina del sueño en el Hospital Houston Methodist. «Si alguno de estos aspectos está alterado, las otras categorías sufren también».
Por ejemplo, tal vez hayas notado cómo una noche de mal sueño puede arruinar tu entrenamiento deportivo al día siguiente o tu productividad en el trabajo.
«Tendemos a pensar en el sueño como un lujo, pero es en realidad una necesidad», enfatiza el Dr. Wright. «No tener suficiente sueño de calidad afecta absolutamente todo».
El especialista del Hospital Houston Methodist nos explica las 5 formas en las que la falta de sueño afecta todo nuestro cuerpo:
1. Estado de ánimo
La irritabilidad, la sensación de estrés, la falta de paciencia o atención, son las formas más obvias en que una noche de mal sueño puede afectar tu estado de ánimo al día siguiente. Pero el Dr. Wright señala que las consecuencias pueden ser más serias.
2. Rendimiento físico
Si bien la rutina de ejercicios debe ser retadora físicamente, hay veces que al entrenar las personas están literalmente luchando más de lo normal para lograr su rutina. ¿Por qué? No descansar bien por la noche podría ser el culpable.
3. Toma de decisiones
«La falta de sueño conduce a la disfunción del lóbulo frontal, que puede afectar negativamente el control de los impulsos y la restricción mental», explica el Dr. Wright. «Cuando la toma de decisiones se torna mala, tendemos a actuar precipitadamente y hacer cosas por impulsividad que no son apropiadas».
4. Sistema inmunológico
Los procesos internos de tu cuerpo también sufren de falta de sueño. Mientras duermes, tu cuerpo es muy activo en los diversos procesos restauradores esenciales para la salud física y mental. Por ejemplo, dormir lo suficiente promueve un sistema inmunológico saludable, lo que ayuda al cuerpo a controlar la inflamación de manera más efectiva y protegerse de los gérmenes dañinos.
5. Regulación del azúcar en sangre
Es fundamental que tu cuerpo regule los niveles de azúcar en la sangre a lo largo del día. Esto asegura que las células tengan la energía necesaria para realizar tareas importantes, pero también mantiene el exceso de azúcar (glucosa) fuera del torrente sanguíneo, por lo que no puede dañar los vasos sanguíneos y los órganos.