El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, firmó una orden ejecutiva con la que restauró la pena de muerte en la Unión Americana, en la que llama al fiscal general a país garantizar el suministro de fármacos para las inyecciones letales en los estados en los que se aplica la pena capital.
De acuerdo a la agencia de noticias EFE en el texto publicado en la página de la Casa Blanca, Trump consideró a la pena capital como una herramienta esencial para disuadir y castigar a quienes cometen los crímenes más atroces y los actos de violencia letal contra los ciudadanos estadounidenses.
El mandatario estadounidense aseguró que esta medida ha sido recurrente en la historia de EU desde su fundación como un elemento disuasorio definitivo y el único castigo adecuado para los crímenes más viles.
La agencia refiere que en EU siempre se ha reconocido que la pena capital es la única opción para traer justicia y restablecer el orden en respuesta a la maldad, por lo que esta medida mantiene amplio apoyo popular.
El presidente Trump se lanzó contra los políticos y jueces que se oponen a la pena capital, a quienes acusó de desafiar las leyes de los Estados Unidos. Los señaló de buscar frustrar la ejecución de sentencias capitales impuestas legalmente, ya que prefieren hacer cumplir sus creencias personales en lugar de la ley.
Por otra parte, expuso que su antecesor, el presidente Joe Biden, permitió que su Departamento de Justicia emitiera una moratoria sobre las ejecuciones federales, desafiando su deber de ejecutar fielmente las leyes de los Estados Unidos que prevén la pena capital.
“El 23 de diciembre de 2024, el presidente Biden conmutó las sentencias de 37 de los 40 violadores, abusadores de menores y asesinos más viles y sádicos en el corredor de la muerte federal: criminales implacables que brutalizaron a niños pequeños, estrangularon y ahogaron a sus víctimas y cazaron a extraños por deporte.
“Conmutó sus sentencias a pesar de que las leyes de nuestra nación siempre han protegido a las víctimas al aplicar la pena capital a actos bárbaros como los suyos. Los jueces que se oponen a la pena capital también han hecho caso omiso de la ley al afirmar falsamente que la pena capital es inconstitucional, aun cuando la Constitución reconoce explícitamente su legalidad”, lanzó.