Con el fin de acrecentar y confirmar la identidad política, histórica y cultural de los habitantes de la Ciudad de México, la diputada local del Partido del Trabajo (PT), Miriam Saldaña presentó el proyecto de decreto por el que se expide la Ley de los Símbolos Patrios de la capital del país.
Saldaña Cháirez explicó que la propuesta busca que la sociedad conozca y respete su pasado y construya su futuro sobre bases firmes partiendo de una historia de 700 años.
“El Himno de la Ciudad de México, es el primero de los símbolos que se contemplan en la Ley que se propone se expida, sin embargo, estos podrían crecer y contribuir a fortalecer la estructura sobre la que se yerguen las bases de esta urbe”, dijo.
Desde la máxima tribuna de la capital, la también secretaria de la Comisión de Desarrollo Rural, Abasto y Distribución de Alimentos del Congreso de la Ciudad de México, señaló que los Símbolos Patrios emergen como poderosos emblemas que trascienden la mera materialidad para convertirse en motores de identidad y cohesión social, especialmente en un mundo cada vez más globalizado y donde las culturas se entrelazan y se reinventa la noción de pertenencia.
“La Ciudad de México tiene una vasta historia, desde sus inicios como una Ciudad prehispánica, pasando por la época de la Colonia, al México independiente como capital de nuestro país y finalmente como Ciudad con una Constitución propia, conservando, a pesar de los cambios, su riqueza histórica y su diversidad cultural, tomando forma como parte de su historia los símbolos oficiales”, recordó la petista.
Dijo que los símbolos patrios no son simples objetos o imágenes, “sino narradores silentes de la trayectoria y la diversidad de un pueblo que se reinventa constantemente, es la evolución histórica de estos emblemas e influye claramente en la política y la cultura de la capital, pues la existencia de dichos símbolos, constituyen elementos fundamentales en la construcción del tejido social y político de la Ciudad de México”.
Enfatizó que los símbolos se utilizan en contextos oficiales y ceremoniales, reforzando un sentido de unidad y pertenencia entre los ciudadanos, además, su presencia en eventos políticos y celebraciones cívicas subraya su importancia como herramientas para promover la cohesión social y el respeto hacia la soberanía territorial.
Por ello y retomando la frase pronunciada por el cronista chimalpahin, Miriam Saldaña Chairez, concluyó: “en tanto dure el mundo, nunca acabará, nunca se perderá, la gloria y la fama de México-Tenochtitlán.