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El patrón respecto a los otros ataques con armas en Estados Unidos es el mismo, un joven con ideas suicidas, anunciando lo que va hacer, rodeado de videojuegos violentos y con acceso a armas de grueso calibre. En el caso del tirador de Highland Park, Robert Crimo III, solo tenía 21 años, y planeó su ataque durante varias semanas, además que se vistió con ropa de mujer para pasar desapercibido mientras huía de la escena.
De acuerdo al relato de la policía de Illinois, quien detuvo al tirador horas después de ejecutar su plan donde sucumbieron seis personas y muchas más resultaron heridas, Crimo llevó un rifle estilo AR-15 a la ruta del desfile en Highland Park, Illinois, y subió por una escalera de incendios hasta el techo de una tienda cercana.
Tras el sangriento episodio, el sargento del condado de Lake, Christopher Covelli, dijo que Crimo fue captado en un video vestido con ropa de mujer para poder mezclarse con la multitud de asistentes al desfile que huían en pánico del lugar de la masacre.
De acuerdo al reporte de noticias de agencias internacionales, el joven logró llegar al techo de la tienda y una vez ahí, abrió fuego contra la multitud que se encontraba abajo y disparó más de 70 cartuchos de balas contra la multitud de asistentes y participantes del desfile.
Tras consumido el hecho, bajo y escapó entre la multitud, caminando hacia la casa de su madre, por lo que el sargento Covelli dijo que no hay indicios de que Crimo le confiara a su madre lo que acababa de hacer y tampoco hay evidencia de que alguien más estuviera involucrado en la masacre.
En el avance de las investigaciones, se supo que Crimo también tenía un segundo rifle dentro de su vehículo cuando fue capturado y en su casa se descubrieron más armas de fuego, incluidas pistolas.
